¿Cómo dejar de procrastinar?. La procrastinación es lo que nos lleva a postergar constantemente nuestras obligaciones, responsabilidades o tareas que nos habíamos propuesto terminar. Es uno de varios patrones de comportamiento que nos llevan a auto-sabotearnos prácticamente sin darnos cuenta. Por suerte, esta tendencia a procrastinar puede ser vencida, así que veamos algunas estrategias
Nuestra Terapia Psicológica Online
¿Cómo dejar de procrastinar? Consejos para dejar de procrastinar
Estas son algunas pautas y recomendaciones que te ayudarán a superar la procrastinación en tu vida cotidiana.
1. Divide las actividades
Es importante hacer una división de las actividades que puede contener la tarea que hemos estado postergando. De esta manera podremos avanzar gradualmente con pequeños avances la actividad sin que se convierta en un martirio, a través de un proceso de trabajo que constantemente nos ofrecerá objetivos a muy corto plazo y que “tirarán de nosotros” fomentando la automotivación. Además, de esta manera, la responsabilidad o proyecto que no te atrevías a acometer será mucho menos intimidante, ya que tu atención irá dirigida a sus componentes más pequeños.
2. Analiza tus pensamientos de evitación y sus consecuencias
Es importante que analices la forma en la que piensas, la forma en que te sientes, como actúas frente a la eventualidad y cuales son las consecuencias que puede generar tu conducta de procrastinación. Para ello tendrás que pensar en el último suceso donde pudiste haber procrastinado ante alguna actividad, una tarea que posteriormente no pudiste concluir o lo hiciste sin esforzarte como debías debido a la falta de tiempo. Tras tomar apuntes de lo señalado anteriormente tendrás que analizar cuáles fueron las consecuencias que generaron el haber procrastinado esa actividad. De esta forma es muy probable que tomes plena consciencia de cómo puede perjudicarte el dejarte llevar por el cortoplacismo al no realizar una actividad hasta concluirla o no hacerlo con el esfuerzo que merece.
Ten en cuenta que si atacas la procrastinación y la tomas como algo normal o incluso bueno para tu estilo de vida, es muy probable que también fomentes tus niveles de ansiedad. Es decir, que si logras vencer el patrón conductual repetitivo de postergar tus actividades, es muy probable que reduzcas tus niveles de ansiedad y mejores tu salud mental en general.
3. Emplea el mindfulness y la meditación para regular la ansiedad
Buena parte de las causas de la procrastinación tiene que ver con una estrategia disfuncional de evasión ante los pensamientos que nos generan ansiedad y que se basan en todo aquello que tenemos pendiente hacer. Es decir, que ante algo que nos preocupa y que vemos problemático (por ejemplo, tener que estudiar para un examen), optamos por centrar nuestra atención en actividades que no tengan nada que ver con eso para distraernos; de ahí que el problema se vaya haciendo más grande y aparezca un círculo vicioso.
Para tener un control de tus pensamientos negativos es importante que emplees el mindfulness, que dirige nuestra atención hacia el momento presente. Empleando la conciencia plena logramos identificar el hecho de que que no poseemos el deseo de realizar una actividad y aceptamos la presencia de la tensión que nos genera la preocupación por nuestras tareas por hacer, sin intentar desterrarlas de nuestra mente. No obstante, es importante posteriormente reconocer por qué es relevante el desarrollo de la actividad y el compromiso con su realización.
- Quizá te interese: Mindfulness: ¿Qué es, para que sirve y como se debe practicar?
4. Céntrate en dar el primer paso
Al empezar las tareas más simples que dan inicio a las actividades que tienes que realizar (por ejemplo, escribir la primeras dos frases de un trabajo para la universidad), habremos vencido gran parte de esa reticencia a emplear nuestro tiempo a afrontar aquello que nos preocupa. No importa si aparentemente es una acción muy corta y fácil, lo importante es empezar aquí y ahora; verás que luego lo que resta no será tan tedioso de terminar si ya has empezado. Al tomar la iniciativa y realizar la actividad que inicia simbólicamente el proceso de trabajo, sentiremos un sentimiento agradable y gratificante de satisfacción, lo que hará que nos resulte más fácil continuar la actividad hasta finalizarla.
5. Refuerza tu conducta
Cada vez que cumplas con un proyecto exigente o que te suponga un reto en los tiempos que has considerado, date algún premio, aunque sea simbólico. Lo importante es que determines de antemano cuándo optarás a esas recompensas, como si te pusieras a prueba. De este modo aprovecharás este tipo de desafíos como un elemento favorecedor de tu autoestima, y no lo verás tan solo como una obligación o algo tedioso, sino como una oportunidad para demostrarte lo que puedes hacer.
6. Si lo necesitas, acude a psicoterapia
La psicoterapia es un contexto muy bueno en el que aprender técnicas de modulación de la ansiedad y de gestión del tiempo de trabajo; no hace falta que hayas desarrollado una psicopatología para beneficiarte de este proceso.
- Quizá te interese: ¿Para qué sirve ir a psicoterapia?
¿Te interesa contar con ayuda psicológica profesional?
Si buscas asistencia psicológica o psicoterapia, ponte en contacto con nosotros. En Avance Psicólogos atendemos a personas de todas las edades tanto desde el ámbito de la terapia psicológica como del coaching, y ponemos a tu disposición nuestros más de 20 años de experiencia en el sector. Nos encontrarás en nuestro centro ubicado en Madrid, en la Calle de Alcalá número 165 (barrio de Goya); también puedes optar por la modalidad de atención psicoterapéutica online a través de videollamada.
Referencias bibliográficas:
Duru, E.; Balkis, M. (2017). Procrastination, Self-Esteem, Academic Performance, and Well-Being: A Moderated Mediation Model. International Journal of Educational Psychology, 6(2): pp. 97 – 119. ¿Cómo dejar de procrastinar?
Gendler, T.S. (2007). Self-Deception As Pretense. Philosophical Perspectives, 21: pp. 231 – 258.