La cultura laboral hipercompetitiva y sus desventajas

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En el ámbito de las organizaciones, la capacidad para lograr conjuntamente los objetivos en cuanto a productividad no tiene que ver solo con las capacidades y conocimientos de cada uno de los empleados por separado; las dinámicas psicosociales que se establecen entre los integrantes de la empresa son muy relevantes en este sentido. Por eso, el estudio de la cultura laboral existente en la organización es uno de los campos de estudio claves desde el punto de vista de los psicólogos del trabajo. Y en este artículo nos centraremos en analizar las desventajas de una de las culturas de trabajo más aplicadas en muchos sectores económicos: la cultura laboral hipercompetitiva.

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Efectos negativos de la cultura laboral hipercompetitiva

Estos son los principales aspectos negativos que tiene el hecho de impulsar una cultura laboral fundamentada en la hipercompetitividad entre los trabajadores.

1. Fomenta la aparición de conflictos

En el año 1963, el psicólogo John Stacy Adams creó la teoría de la igualdad. Mediante esta teoría dicho investigador explica lo que un trabajador siente al compararse con otro profesional que cumple sus mismas funciones y tiene su mismo puesto laboral. Si el colaborador se llegase a enterar de que su compañero de trabajo tiene beneficios mayores o realiza un esfuerzo menor al que él, probablemente se desmotive.

Es ahí donde se genera un agravio comparativo, así como el sentimiento de injusticia si es que llegara a interpretar que su compañero tiene mayores beneficios que él. Ello terminaría generando un caótico ambiente laboral, pues el primer colaborador posiblemente deje de trabajar como lo solía hacer, hablaría mal de la organización y de su compañero. Probablemente hasta llegar al extremo de querer arruinar su propio trabajo o el de su colega.

No es una novedad, que muchas personas puedan llegar hasta perder su trabajo debido a que realizan una interpretación errónea de lo que realmente sucede, llegando a pensar que lo mejor sería dejar el puesto donde están y buscar otro espacio donde valoren lo que ellos creen que no se valora en su trabajo actual. Sin embargo, cuando logran encontrar un nuevo lugar de trabajo nuevamente sucede lo mismo si se fomenta esa mentalidad de constante comparación con el resto.

Podría parecer que la cultura laboral hipercompetitiva evita que surjan estos problemas, ya que en teoría promueve un modelo de trabajo basado en la meritocracia; sin embargo, lo cierto es que ocurre más bien lo contrario, dado que las situaciones de injusticia e inequidad resultan en gran parte subjetivas y al animar a los trabajadores a competir entre sí, también se estimula esa constante búsqueda de situaciones en las que los progresos de uno suponen la derrota de otro.

2. Hace que buena parte de la implicación laboral se salga de las lógicas de la productividad

Es importante tener en consideración que cuando los trabajadores dedican parte de su tiempo y de sus esfuerzos a compararse con los demás y a intentar “ganarles” en algo, muchas veces se pierde competitividad a nivel global, aunque parezca paradójico. Es decir, que estas lógicas de competir con las personas de nuestra empresa o departamento pueden originar la aparición de distracciones, lo cual es malo tanto para la organización como, a medio y largo plazo, para cada uno de los trabajadores de manera individual.

3. Facilita la aparición de problemas de exceso de estrés

El hecho de tener la atención dividida entre los objetivos de productividad, por un lado, y las maniobras que percibimos que los demás realizan para “adelantarnos” en esa carrera por ser el mejor, por el otro, hace que en poco tiempo se desgaste la salud mental de los trabajadores. Esto no solo se refleja en un empeoramiento de su calidad de vida; también da lugar a más ausencias el trabajo por baja laboral, y hace que surjan más malentendidos y errores debido a los problemas para concentrarse en lo que se hace (uno de los efectos del exceso de estrés es una bajada de la capacidad para centrar la atención en la tarea y para recordar información valiosa).

4. Hace que los trabajadores no puedan desconectar del trabajo en su tiempo libre

Allí donde hay una cultura de trabajo basada en la hipercompetitividad, hay problemas para dejar de pensar en el contexto laboral. Esto hace que los empleados no puedan disfrutar de sus vacaciones y sufran problemas de conciliación familiar, ya que muchas veces se sienten culpables si “desconectan” de su rol laboral y por ello siguen pensando en el trabajo en casa, revisando su correo electrónico constantemente, intentando avanzar trabajo con el portátil en cualquier sitio con WiFi, etc.

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Referencias bibliográficas:

Drenth, P.J.D.; Thierry, H.; de Wolff, C.J. (1998). Handbook of work and organizational psychology. Hove: Psychology Press.

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autora del artículo

Laura Palomares Pérez

PSICÓLOGA - SEXÓLOGA COLEGIADA M-15270

Laura Palomares (Madrid, 1973) se licenció en Psicología en la por la UAM, funda y forma parte de Avance Psicólogos desde el año 1999. Amplía su formación en los siguientes ámbitos de la psicología: Título de Formadora en Sexología por el Instituto de Ciencias Sexológicas (In.Ci.Sex) Universidad de Alcalá de Henarés. Master en Sexología por el Instituto de Sexología de Madrid (In.Ci.Sex) Universidad de Alcalá de Henares. Prácticum en la Sociedad Sexológica de Madrid-Fundación SEXPOL. Título de Especialista en Terapia Gestalt, por la Fundación Laureano Cuesta en la Universidad de Comillas. Especialista en Terapia de Pareja, por el Centro Psicológico Dr. De Francisco. Diploma en Técnicas de Integración Cerebral (TIC), por el Centro de Terapias de Avanzadas. Tras 25 años de experiencia como psicoterapeuta, ahora colabora como divulgadora para medios especializados en el ámbito de la Psicología y la salud.

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