Violencia Psicológica: ¿Qué es y cómo podemos detectarla? Hoy en día, la violencia forma parte de nuestras vidas, casi como algo habitual y rutinario. En la televisión no dejan de salir noticias sobre guerras, agresiones, violencia contra las mujeres…y podría seguir con una larga lista de violencia. En el reino animal la violencia, ese instinto agresivo que les lleva a matar, sólo viene por la necesidad de comer, defender sus crías o llevarse a la hembra para la procreación. Por tanto, la violencia es una herramienta para poder sobrevivir como especie.
En el caso de nosotros, los seres humanos, la violencia en el siglo XXI, realmente no la necesitamos para nada. En cambio, ésta se da todos los días, ¿qué es la violencia psicológica? y ¿podemos detectarla?
A lo largo de este artículo, mi objetivo es tratar de dar respuesta a estas dos preguntas. Por ello, en este post, vamos a hablar sobre la violencia psicológica, una violencia invisible pero con múltiples efectos para quienes la sufren. De esta manera, podremos aprender a detectarla para poder defendernos de ella.
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¿Qué es la violencia psicológica?
La violencia psicológica, es un tipo de violencia invisible. Decimos que es invisible porque no deja consecuencias visibles, como puede pasar en la violencia física. Pero no por ello es una violencia menos grave o con menos consecuencias para quienes la sufren. Muy al contrario, este tipo de violencia puede tener unos efectos a largo plazo, más duraderos que la violencia física.
Es por ello, que es importante saber detectar cuando existe violencia psicológica y poder tener recursos para hacerla frente. Además creo que es importante hablar de ello, porque es un tipo de violencia que al no dejar tanto rastro visual, se puede dar en muchos ámbitos de la vida cotidiana. Puede darse en el trabajo, familia, escuela, grupo de amigos/as, relaciones románticas…
7 claves para saber cómo detectarla
A continuación, te damos 7 claves para que te ayuden a detectar la violencia psicológica y así poder afrontarla. Mi objetivo con estas claves es que te ayuden a detectar si tienes a tu alrededor algún tipo de violencia psicológica en tu entorno.
1. Agresiones verbales
Esto parece muy obvio, pero muchas veces tenemos tan asumido los insultos, que no somos conscientes que esto es una forma de violencia psicológica. Muchas veces utilizamos el insulto o menosprecios en forma de broma, ironía, y no nos damos cuenta que a largo plazo, puede crear en la persona que lo recibe un daño.
Por ello es importante, en caso que seamos el objeto del insulto, identificar cuáles son las sensaciones y sentimientos que nos florecen. De esta manera, podemos comunicar a
la persona que nos lo está haciendo, nuestros sentimientos y en caso que nos afecte, poder pedirle que deje de hacerlo.
2. Chantaje emocional
Desgraciadamente, esto también es algo que nos es bastante familiar y que se usa en muchas familias, relaciones de pareja y de amistad. Cuando el chantaje emocional se produce de forma sistemática en cualquier tipo de relación, es una señal clara de que hay violencia psicológica. El chantaje emocional, consiste en lograr lo que quieres de una persona a través de hacerle sentir mal a dicha persona.
Algunos ejemplos pueden ser: “tranquila pásatelo muy bien y disfruta, yo me quedaré aquí aburrido sin hacer nada”. Esto puede parecer que lo que transmite es el deseo de que la otra persona se lo pase bien, pero el final de la frase induce a pensar que si la persona se va por ahí, la otra persona se queda aburrida en casa. Por lo tanto, la persona que sale pasa a ser el motivo por el que la otra persona se aburrirá. Este tipo de manipulación puede ser muy sutil a veces, y puede costar darte cuenta de lo que está sucediendo.
3. Manipulación
Esto tiene relación con el chantaje emocional del que hablábamos antes. Lo difícil de la manipulación, en este tipo de violencia, es que es muy sutil. Suele ir sucediendo de menos a más, es decir, al principio es muy discreta y gradualmente va siendo más agresiva y violenta. La manipulación se va agravando cuando la persona que sufre la violencia, ya está con la autoestima muy baja, y no tiene las herramientas para darse cuenta y poder afrontar esta agresión.
Algunas frases de este tipo nos pueden ayudar a identificar la manipulación; “que histérica te pones, cuando yo he hablado tranquilamente” “¿ves cómo eres tú realmente la agresiva? Yo no grito” “haz lo que quieras, pero que sepas que yo estoy muy triste”. Todas estas frases, nos pueden ayudar para saber si estamos ante una manipulación. Además de también observar el efecto que tiene en la persona agredida, que suele ser de total sumisión. “En realidad tiene razón, la que grito soy yo”.
4. Aislamiento
A medida que todas estas cosas se van dando y van haciendo mella en la persona que recibe violencia psicológica, se va produciendo el aislamiento. La persona agresora, poco a poco va provocando que la persona maltratada, no tenga nadie más que el agresor como recurso. De esta manera consigue que nadie cercano a la víctima sepa lo que está pasando, para que no se den cuenta y pueda seguir ejerciendo la violencia.
Es por esto, que si tenemos alguna persona cercana que sospechemos que está viviendo algún tipo de violencia, debemos ir de forma muy cuidadosa, sin juzgar. Lo que necesita la persona que recibe violencia es comprensión por parte de las personas que todavía le quedan.
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5. Culpabilización
Esto forma parte de la manipulación, el agresor de cara a poder controlar a su víctima y que no se vaya, lo que hace es que sea la víctima la que piense que es la culpable de las discusiones o de los problemas de la relación. Constantemente el agresor va a buscar de qué manera puede hacer responsable a la víctima de lo que haya ocurrido.
Una de las claves que nos puede ayudar a detectar este signo de violencia psicológica, es que la víctima constantemente va a tratar de justificar a la persona que le agrede. Lo va a “salvar” de cualquier situación desagradable que ocurra entre ellos. En caso que seamos la víctima, nos puede ayudar identificar si el agresor pide perdón en algún momento o si siempre es la víctima, la que termina disculpándose.
6. Control
A través de la manipulación y algunas de las señales que hemos descrito anteriormente, el agresor poco a poco va teniendo control sobre la víctima. Como todo en este tipo de violencia, este control es muy sutil. Probablemente si la víctima se queja a alguna persona de su entorno más cercano, el agresor va a tratar de justificar y explicar ese “control” para que no sea algo tan evidente.
Algunas cosas que nos pueden ayudar a detectar este control pueden ser frases como: “cuando lo hable con mi pareja, a ver que dice” “a mi pareja no le gusta…””si hago esto mi pareja me va a decir…”
7. Minimización
Esta señal para mí es el resultado de un largo periodo de tiempo de violencia psicológica. Después de estar escuchando constantemente insultos, menosprecios, sentir que estás haciendo o diciendo cosas malas…el resultado es que estás personas sienten que son peores que las demás. Para mí esta es la consecuencia más complicada de recuperar, ya que influye directamente en la autoestima.
Además en estos casos, en los que este tipo de violencia se da en la pareja, se suma que la persona que te está agrediendo, al mismo tiempo la quieres.
Conclusiones sobre la violencia psicológica
Espero que después de leer este post, la violencia psicológica sea algo de lo que sepas un poco más y que te haya ayudado a poder detectar los signos de este tipo de violencia. Generalmente la violencia psicológica no es algo de lo que se hable abiertamente, en parte creo que porque muchas veces algunas de las señales de esta violencia las hemos normalizado. En nuestra sociedad hay un déficit en la comunicación así como un estilo bastante agresivo y a veces muy manipulador, lo que dificulta poder identificar que se está dando violencia psicológica.
Mientras estaba escribiendo este post, me daba cuenta de lo poco que se habla sobre este tipo de violencia específicamente. Y por tanto, el gran problema que esto supone en nuestra sociedad. Es una realidad escondida, que a veces genera vergüenza en la victima por lo que hace aún más difícil que se haga visible. Es por esto, que me parece importante escribir sobre ello, para que poco a poco vayamos visibilizando este tipo de violencia, y podamos poner en marcha los recursos de los que disponemos.
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Si después de leer este post, te sientes identificado/a con estos signos de violencia psicológica, o si te viene a la cabeza alguna persona cercana, te animo a que trates de iniciar un proceso de psicoterapia. En Avance Psicólogos contamos con un equipo de profesionales multidisciplinar que puede ayudarte a encontrar las herramientas para hacer frente a la violencia y/o a identificarla. Nuestro equipo te podrá ayudar desde las áreas de la psicoterapia donde podrás aprender a poner en marcha dichos recursos.
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Referencias bibliográficas
Cáceres Carrasco J. (2004). Violencia física, psicológica y sexual en el ámbito de la pareja: papel del contexto
Bonino L. (1999). Las microviolencias y efectos: claves para su detección
